¿Utilizas cerraduras de cilindro como fuente principal de seguridad?
Si la respuesta es sí, corres el riesgo de estar a merced de delincuentes con un poco de conocimiento y herramientas básicas para violentarla.
Se trata del método bumping, un modus operandi casi perfecto para ingresar a una propiedad abriendo la puerta y sin necesidad de arrebatarle la llave al propietario; pero, ¿exactamente qué es y cuándo lo eligen los ladrones?
Veámoslo.
El bumping es un método de robo en el que el delincuente se prepara para abrir una puerta sin la necesidad de arrebatarle la llave al propietario y sin dejar signos de una entrada forzada.
He allí el riesgo de este método, pues el ladrón introduce en el cilindro cualquier otro tipo de llave manipulada y, a continuación, golpea la cerradura con el propósito de alinear los pasadores e ingresar a la propiedad para cometer cualquier tipo de delito.
Y lo más inquietante de esto, es que la cerradura continuará funcionando normalmente después de efectuado el robo.
Con un poco de práctica, algunas herramientas y una puerta poco segura a su paso, el delincuente tendrá la oportunidad perfecta para llevar a cabo el método de robo casi perfecto, y decimos casi perfecto, porque afortunadamente existen alternativas de protección para prevenir el bumping.
Esta es una técnica de robo que no requiere ninguna habilidad especial y es efectiva la mayoría de las veces; por eso, al tratarse de una amenaza real, es importante saber cuándo eligen los ladrones el método bumping, sobre todo si proteges tu hogar con cerraduras cilíndricas.
Sin embargo, te damos un dato: si sientes que tu casa no está del todo protegida, entonces los ladrones también lo notarán.