Segurhogar

Cómo camuflar tu caja fuerte

Cómo camuflar tu caja fuerte

El mayor problema al que se enfrentan aquellos que deciden comprar una caja fuerte es dónde ocultarla. Es cierto que muchas por su tamaño no pueden ser escondidas más allá de lo evidente, pero algunas permiten ser instaladas en paredes, suelos, mobiliario…de modo que quedan fuera del alcance directo de los ladrones.

Ahora bien, ¿dónde escondo mi caja de seguridad? Son muchas las películas donde la caja fuerte está oculta detrás de un cuadro o bajo una alfombra, pero es un factor con el que tanto propietarios como ladrones conocen.

Sé original

Camuflar cajas fuertes de alta seguridad, no consiste en encontrar un rincón de la casa de difícil acceso o simplemente fuera del alcance en un primer vistazo. Los ladrones tienden a mirar todos los sitios, por lo que deberemos ser más que originales. Debemos olvidarnos de los tópicos de esconder nuestra caja fuerte detrás de un cuadro, bajo la alfombra o incluso en la rendija de aire acondicionado. Debemos ser originales, ir más allá de lo que comúnmente conocemos todos.

Juega con la psicología

Mira tu casa y pregúntate: ¿qué sitios miraría si fuera un ladrón? si eres capaz de dar una buena lista de sitios de tu propia casa, ya sabes al menos dónde no esconder tu caja de seguridad. Los ladrones van a mirar los sitios más evidentes y todos los a los que fácilmente puedan acceder. Lugares tan concretos como bajo la cama, detrás de los muebles, entre los libros o encima de las estanterías más altas son algunos de los sitios más lógicos donde alguien buscaría. ¿Qué sitios no se te ocurriría o no caerías a la hora de buscar objetos de valor?

Aprovecha que el partido se juega en casa. Tú, como dueño, conoces la casa mejor que nadie. Sabes qué rincones hay que pueden no ser tan comunes en otras viviendas y puedan despistar a cualquier ladrón.

Los ladrones son también humanos

Si fueras a robar a una casa, ¿por dónde empezarías? seguramente querrías robar todo aquello:

  • Valioso
  • Rápido de obtener
  • Fácil de transportar

Además querrías hacerlo en el menor tiempo posible. Lo mismo sucede con los ladrones reales, quieren robos rápidos, sin complicaciones y que permitan escapar rápido. Una caja fuerte de Segurhogar impide que un ladrón pueda abrirla, transportarla de una forma sencilla y aprueba de incendios o inundaciones, ¿crees que querrían perseverar vanamente? Cuantas mayores trabas tengan, menos ganas de robar tendrán en tu hogar.

Una caja fuerte que se ancle en una pared o suelo requiere arrancarla del sitio donde ha sido instalada, generando una gran cantidad de ruido que alerta a vecinos y disuade a los propios ladrones de captar la atención. Si a esto le añadimos la dificultad para encontrarla…las probabilidades de éxito son prácticamente nulas.

Trabas, trabas y más trabas

Sigamos con la psicología. Un ladrón quiere un golpe rápido, sin llamar la atención, con facilidad de llevarse objetos de valor… y si juegas con esa baza? A veces una caja fuerte en un sitio evidente centra toda la atención allí, y más si esa caja fuerte es solo para despistarles de donde realmente están los objetos de valor.

Imagina que consiguen abrir una caja fuerte (que ya es todo una odisea) y ven la caja fuerte vacía o con objetos que realmente no tienen valor para ellos…puede ser un sentimiento de frustración que podría hacer desistir a cualquiera.

En pocas palabras, los ladrones siempre juegan en desventaja, si somos lo suficiente ingeniosos podemos hacer de un golpe seguro algo imposible, lo que ofrece mayor seguridad a tu hogar y a quienes más quieres.